cristales con cenizas

Diferencias entre incineración y cremación

Perder a un ser querido hace que nos enfrentemos a una de las situaciones más dolorosas que pasaremos a lo largo de nuestras vidas. Para confrontar la pérdida no tenemos ninguna preparación previa, en ocasiones se prevé que sucederá debido a enfermedades o a avanzada edad, pero jamás conocemos los pasos para sobrellevar esta situación de la manera menos dolorosa posible. 

Cuando perdemos a alguien, no solo hay que afrontar que jamás volveremos a verle, sino que además hay que realizar una serie de trámites legales, permisos, funerarias, féretros y una serie de actividades que probablemente desconocemos y no nos veamos preparados debido al momento por que estamos pasando.

Una de las decisiones que tenemos que tomar es acerca de qué hacer con los restos mortales de nuestro ser querido si el difunto no ha dejado una voluntad expresa sobre qué hacer, si inhumación o cremación

En la última década, la opción de la cremación ha ganado terrenos por suponer menores complicaciones para la familia del difunto. En estos momentos, tomar ciertas decisiones puede aumentar el estrés, sobre todo si sufre la confusión de tener que decidir entre incineración o cremación. 


¿Realmente hay alguna diferencia?

Si lo vemos desde el punto de vista lingüístico, no hay diferencia alguna, pues no entrañan ningún proceso adicional o añadido. Sin embargo, el acto que acompaña las exequias de un difunto y que somete al cuerpo a altas temperaturas, se debe denominar cremación. Aplicar uno u otro término, no acarrea ninguna alteración de procesos, simplemente que el término cremación se aplica exclusivamente a la incineración de restos mortales. La incineración comprende un término más amplio y que abarca la transformación térmica de cualquier materia orgánica o inorgánica.

Por lo tanto, la forma más adecuada de referirse al acto que se realiza para la transformación en cenizas de un cuerpo humano, es la cremación


¿Por qué es más económico que un entierro?

La cremación puede llegar a suponer un ahorro del 70% respecto a la inhumación.  La inhumación acarrea la adquisición de una propiedad de bienes raíces, como lo es una parcela en un cementerio, un nicho vertical o un espacio en un panteón. Supone también unas exequias que llevan consigo una ceremonia, una lápida y ornamentos, que suelen ser costosos. 

Las parcelas de camposantos, ameritan el pago de cuotas de mantenimiento mensual o anual. Impuestos municipales y otros gastos asociados. La cremación, sólo implica un coste asociado al proceso del horno crematorio y la urna contentiva de las cenizas resultantes.


¿Qué hacer con las cenizas?

Algunas personas mantienen las cenizas en columbarios, nichos en iglesias, cementerios o lugares públicos especialmente adaptados.  Estos espacios, acarrean una cuota de mantenimiento y adquisición, que puede variar entre un sitio y otro. Otros las mantienen en espacios diseñados para tal fin en sus propias casas. Aunque muchos especialistas en duelo, son contrarios a esta práctica.

Muchos difuntos dejan especificado esparcir sus cenizas en lugares públicos o naturales. Sin embargo, esta práctica está bastante restringida y en algunos casos, totalmente prohibida. Conviene pensar en el destino que daremos a las cenizas de nuestros familiares antes de contravenir alguna ley o tomar acciones equivocadas.

Lo más sentido, económicamente viable y que deja un hermoso recuerdo en nuestros familiares, son las joyas de cenizas. cristales con cenizas, diamantes con cenizas, cristales, retratos y colgantes para cenizas, son parte de las creaciones más populares entre familiares y amigos. El arte y la belleza de las creaciones de cenizas, son la manera más bella de rendir un justo homenaje a nuestros seres queridos y llevarlos siempre con nosotros.